La adicción insaciable del fenómeno “Flappy Bird”

• Javier
• 12 febrero, 2014

Un pajarito que avanza al son del arrastre de nuestro dedo en la pantalla del ‘smartphone’ o de la tableta cuya única complicación es tener que esquivar las tuberías que van saliendo a su paso. Esto es todo lo que se necesita para crear todo un fenómeno que puede acabar devorando a su propio creador. Así era básicamente “Flappy Bird”, la última aplicación que ha conseguido revolucionar el mercado gracias a la insaciable adicción que generaba en el usuario.

La bola de nieve se hizo tan grande que fue el propio Nguyen Ha Dong el que sintió que tenía que ponerle fin. Según declaró el desarrollador  a la revista Forbes, su invento se había transformado en “un producto adictivo” y se estaba convirtiendo “en un problema”. Así pues, no veía otra solución que cerrarlo.

En cambio, esto no hizo sino poner aún más en evidencia hasta donde llegaba la necesidad de la gente: eBay tuvo que cancelar la subasta de un iPhone que había alcanzado los 99.900 dólares porque llevaba instalada el juego cuando este ya se había cancelado.

¿Pero cómo se consigue un éxito así? ¿Qué tiene de especial este juego? En una palabra, sencillez. No es la primera aplicación que con un funcionamiento básico ha conseguido millones de descargas. Y es que solo la versión de Android se ha descargado 50 millones de veces. En cuanto a la versión de iOS, ha sido la número uno en la Apple Store de un centenar de países.

Todo se basa en su sencillez, las tuberías aparecen de forma aleatoria, no hay modo de calcularlo previamente por mucho que ya hayas jugado, y con que te equivoques solamente una sola vez, estás muerto, tienes que volver a empezar. Y ahí es cuando entra en juego el sentido de competencia tan característico del ser humano, que hace que sea casi imposible dejarlo.

“Flappy Bird” ya no se puede descargar, pero aquellos que lo hicieron con anterioridad todavía tienen la suerte o la condena de poder seguir jugando. Pero que no se tiren de los pelos los que llegaron demasiado tarde, pueden recurrir a otras creaciones de Ha Dong como Super ball Juggling y Shuriken block, también adictivas hasta la médula y, evidentemente, también entre las más descargadas.

Imagen: Desiree Catani/Flickr

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